sábado, 28 de abril de 2012


¡Hola Dios! ¿Cómo estás?...

                           






















Te escribo para saludarte y porque ahora sí tengo que surtirme, pues la "canasta básica" con que me mandaste al mundo se me ha ido agotando a lo largo de estos años.
Por ejemplo, la paciencia se me acabó por completo, igual que la prudencia y la tolerancia. Ya me quedan poquitas esperanzas y el frasquito de fe, está también vacío. La imaginación también está escaseando por estos rumbos.
También debes saber que hay cosas de la canasta que ya no necesito como la dependencia y esa facilidad para hacer berrinches, que tantos enojos y problemas me han ocasionado. Así que quisiera pedirte nuevos productos para la canasta:
Para empezar me gustaría que rellenaras los frascos de paciencia y tolerancia (pero hasta el tope), y mándame por favor el curso intensivo "Cómo ser más prudente", volúmenes 1, 2 y 3.
Envíame también varias bolsas grandes, pero "bolsones" de madurez que tanta falta me hace. También quisiera un baúl de sonrisas, de esas que alegran el día a cualquiera. Te pido que me mandes dos piedras grandes y pesadas para atarlas a mis pies y tenerlos siempre sobre la tierra.
Si tienes por ahí guardada una brújula para orientarme y tomar el camino correcto, te lo agradecería mucho.
Regálame imaginación otra vez; pero no demasiada, porque debo confesar que en algunas ocasiones tomé grandes cantidades y me empachó. Nuevas ilusiones y una doble ración de fe y esperanza también me caería excelente.
Te pido también una paleta de colores para pintar mi vida cuando la vea gris y oscura. Me sería muy útil un bote de basura para tirar todo lo que me hace daño.
Por favor mándame un frasco de merthiolate y una cajita de curitas para sanar mi corazón, porque últimamente ha tropezado bastante y tiene muchos raspones.
Te pido unos diskettes, porque tengo el cerebro lleno de información y necesito espacio para guardar más.
Te pido muchas zanahorias, para tener buena vista y no dejar pasar las oportunidades por no verlas. Necesito también un reloj grande, muy grande, para que cada vez que lo vea me acuerde de que el tiempo corre y no debo desperdiciarlo.
¿Podrías mandarme muchísima fuerza y seguridad en mí mismo, ah? Sé que voy a necesitarlas para soportar los tiempos difíciles y para levantarme cuando caiga.
También quisiera una cajita de pastillas de las que hacen que crezca la fuerza de voluntad y el empeño, para que me vaya bien en la vida y te pido unas tres o cuatro toneladas de "ganas de vivir", para cumplir mis sueños.
Necesito también una pluma con mucha tinta, para escribir todos mis logros y mis fracasos.
Pero más que nada, te pido que me des mucha vida, para lograr todo lo que tengo en mente y para que el día que me vaya contigo, tenga algo que llevarte y veas que no desperdicié el tiempo aquí en la Tierra.
De antemano te agradezco lo que puedas mandarme y te agradezco el doble todo lo que me enviaste la primera vez.
Con mucho cariño....




jueves, 19 de abril de 2012


La Vida es Corta

La vida es corta, rompe tus reglas personales.
Perdona rápido, besa lento, sin prisa y con suavidad,
Ama de verdad, no dejes de sonreír, no prometas imposibles,
ten compasión del desvalido.
Busca el murmullo de los bosques,
contempla los atardeceres,
huye del bullicio insustancial,
cierra tus oídos a lo intrascendente,
abraza a tu madre y acaricia los hombros de tu padre,
pues aunque no lo creas,
ellos te necesitan,
vuela en tus sueños pero ten los pies firmes en la tierra,
compra lo necesario pero en ocasiones date gustos,
viaja, no importa la distancia,
abrígate bien pero desnuda tus pies en la playa,
date tiempo para tus hijos, canta de vez en cuando aquella vieja melodía,
refúgiate en lo divino porque da fortaleza,
enamórate sin reproches,
se paladín de libertades, lee buenos libros,
y se protagonista al practicar deportes,
al final no importa el triunfo,
se bueno con los animales,
ellos también tienen su lugar en el planeta, come mesurado,
degusta tus bebidas sin gritos ni presunciones,
no creas todo lo que ves, acércate a los buenos,
enseña afable sin importar la edad del semejante,
asómbrate de vez en cuando,
se valiente en la enfermedad y cuando se llegue el momento de partir,
recuerda que tu velero fue único,
que los vientos bonancibles o contrarios solo fueron efímeros y circunstanciales y entonces cuando las sombras de la noche eterna cubra tus pupilas,
invariablemente sólo te quedará exclamar:
¡Qué corta es la vida, pero cumplí con ella!

lunes, 9 de abril de 2012


Hubo un momento 

Hubo un momento en el que la noche parecía eterna y hoy todo eso parece tan lejano.
Hubo un momento en el que nada de lo que hacías resultaba, cuando de pronto apareció la respuesta.
Hubo un momento en el que dejaste de creer en el amor y de repente tu corazón, con más intensidad que nunca, lo encontró de nuevo.
Hubo un momento en el que por el desierto se esparcían tus palabras y hoy dan retoño sus semillas.
Hubo un momento en el que creíste que era lo peor que te podía pasar y hoy agradeces tu destino.
Hubo un momento en el que jurabas que no podrías pasar esa prueba y hoy es tan sólo un paso más.
Hubo un momento en el que creíste que no podías hacer algo y hoy te sorprendes de lo bien que lo haces.
Hubo un momento en el que los monstruos y los ogros intimidaban tu vida y hoy sonríes al ver cómo tus miedos engrandecían sus sombras.
Nunca olvides que la vida es más grande que tus miedos, que tu fuerza es mayor que tus dudas.
Aunque tu mente esté confundida, tu corazón siempre sabrá la respuesta, y con el tiempo, lo que hoy es difícil, mañana será un tesoro.
 Sólo por hoy elige pensamientos y emociones positivas. Notarás la diferencia

domingo, 1 de abril de 2012


SÓLO DIOS PUEDE...

Sólo Dios puede dar la fe pero tú puedes dar tu testimonio.
Sólo Dios puede dar la esperanza, pero tú puedes dar confianza a tus hermanos.
Sólo Dios puede dar amor, pero tú puedes enseñar a amar a los demás.
Sólo Dios puede dar la paz, pero tú puedes suscitar la concordia.
Sólo Dios puede dar la fuerza, pero tú puedes sostener al desfallecido.
Sólo Jesús es el camino, pero tú puedes mostrarlo a los demás.
Sólo Jesús es la luz, pero tú puedes hacerla brillar a los ojos de todos.
Sólo Jesús es la vida, pero tú puedes devolver a otros el deseo de vivir.
Sólo Dios puede hacer lo que parece imposible, pero tú puedes hacer lo que es posible.
Sólo Dios se basta a sí mismo, pero prefiere contar contigo.