lunes, 24 de septiembre de 2012

Me dispongo a perdonar



Me Dispongo a Perdonar


Me gusta la sensación
de libertad que siento
cuando me quito la pesada
capa de críticas, miedo,
culpa, resentimiento
y vergüenza.

Entonces puedo perdonarme
a mí y perdonar a los demás.
Eso nos deja libres a todos.
Renuncio a darle vueltas
y más vueltas
a viejos problemas.
Me niego a seguir viviendo
en el pasado.
Me perdono por haber
llevado esa carga
durante tanto tiempo,
por no haber sabido
amarme a mí
ni amar a los demás.

Cada persona es responsable
de su comportamiento.

Así pues no necesito
castigar a nadie,
todos estamos sometidos
a las leyes de
nuestra propia conciencia,
yo también.

Continúo con mi trabajo
de limpiar las partes
negativas de mi mente
y dar entrada al amor.
Entonces me curo.


martes, 11 de septiembre de 2012

SI



SI

Si puedes llevar la cabeza sobre los hombros
bien puesta,… cuando otros la pierden y de ello
te culpan;
Si puedes confiar en ti cuando todos de ti dudan,
pero tomas en cuenta sus dudas;
Si puedes esperar sin que te canse la espera,
o soportar calumnias sin pagar con la misma
moneda,
o ser odiado sin dar cabida al odio,
y no por eso parecer demasiado bueno o sabio.
Si puedes soñar sin que tus sueños te dominen;
Si puedes pensar sin que tus pensamientos sean
tu meta;
Si puedes habértelas con Triunfo y Desastre
y tratar por igual a ambos farsantes;
Si puedes tolerar que los bribones 
tergiversen la verdad que has expresado
y la convierten en trampa para necios,
o ver en ruinas la obra de tu vida
y agacharte y reconstruirla con viejas
herramientas.
Si puedes hacer un atado con todas tus
ganancias
y arrojarlas al capricho del azar,
y perderlas y volver a empezar desde el principio
sin que salga de tus labios una queja;
Si puedes poner al servicio de tus fines el corazón,
el entusiasmo y la fortaleza, aún agotados,
Y resistir aunque no te quede ya nada,
Salvo la voluntad que te diga ¨Adelante!¨.
Si puedes dirigirte a las multitudes sin perder la
virtud,
y codearte con reyes sin perder la sencillez;
Si no pueden herirte amigos ni enemigos;
Si todos cuentan contigo en demasía;
Si puedes llenar el implacable minuto,
con sesenta segundos de esfuerzo denodado,
Tuya es la Tierra y cuanto en ella hay,
Y más aún, Serás un hombre, hijo mío!        

domingo, 2 de septiembre de 2012


A partir de mi próximo amanecer 

 

Hoy me di un tiempo para pensar en la vida, en  MI VIDA.
Decidí entonces que a partir del próximo amanecer voy a cambiar algunos detalles para ser cada  nuevo día un poquito más feliz.
Para comenzar, no voy a mirar para atrás. Lo que pasó, es pasado. Si erré, ahora no voy a poder corregirlo.
Entonces ¿para qué remover lo que pasó? Sí, reflexionar sobre esos errores para hacer de ellos un aprendizaje para “mi hoy”…
No todas las personas que amo retribuyen mis cariños como a mi me gustaría…¿Y qué pasa…? A partir del próximo amanecer voy a continuar amándolas, pero no voy a tratar de cambiarlas…
Eso no lo deseo. Cambio yo… Cambio mi modo de verlas, respeto su modo de ser. ¡¡¡Pero no pienses que voy a desistir de mis sueños !!!
A partir del próximo amanecer voy a luchar con más garra para que ellos se cumplan, pero va a ser diferente. No voy a volver a responsabilizar a nadie por mi felicidad.
¡VOY A SER FELIZ…!!!
Ya no voy a parar mi vida porque lo que deseo no sucede, porque un mensaje no llega, porque no oigo lo que me gustaría oír. Voy a crear mi momento…Voy a ser feliz ahora…
Tendré otros días por delante, nunca más daré mucha importancia a los problemas que aún no conseguí resolver.
A partir del próximo amanecer voy a agradecer a Dios por todos los días, por darme fuerza para vivir, a pesar de mis problemas.
Dejaré de sufrir por lo que no consigo tener, por lo que no oigo o no veo, o por el tiempo que no tengo.  Tampoco sufriré más por anticipado,  pensando siempre lo peor…
A partir del próximo amanecer, sólo voy a pensar en las cosas buenas que tengo. Mis amigos y mi familia nunca más necesitarán  darme un hombro para llorar. Voy a aprovechar su presencia para sonreír, cantar, para repartir felicidad.
A partir del próximo amanecer voy a ser yo mismo, nunca más voy a tratar de ser un modelo de perfección.
Nunca más voy a sonreír sin ganas o decir palabras amorosas sólo porque creo que los demás quieren oírlas.
A partir del próximo amanecer voy a vivir mi vida
SIN MIEDO A SER FELIZ
y aprenderé a quererme cada día un poquito
más.