La
alegría de vivir…
Alegría permanente sin motivo
alguno…
En la vida ordinaria, te alegras cuando hay un
motivo: has conseguido el trabajo que deseabas, has encontrado la persona que
te entiende…. Pero estas alegrías no pueden durar mucho; son momentáneas, no
pueden permanecer de forma continua e interrumpida.
Si tu alegría está causada por algo, desaparecerá,
será momentánea, pronto te dejará sumido en una profunda tristeza.
Hay una clase distinta de alegría que es un signo de
confirmación: de pronto estás contento sin ninguna razón. No puedes decir por
qué. Si alguien te pregunta: ¿por qué estás tan alegre?, no tienes respuesta.
Esta alegría no puede ser perturbada. Pase lo que
pase, continuará. Está allí, día tras día. Seas joven o viejo, estés vivo o
estés muriéndote, siempre está ahí. Cuando hayas encontrado una alegría que
perdure, aunque las circunstancias cambien, es señal de que estas acercándote
al estado búdico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario